¿Qué es la cultura empresarial y por qué es tan importante?
¿Qué es la cultura empresarial y por qué es tan importante?
La cultura empresarial refleja el conjunto de creencias, hábitos, costumbres y valores que caracterizan a la organización y que se manifiestan por medio de lo que expresan las personas que trabajan en las empresas.
La cultura empresarial está compuesta por normas escritas y normas no escritas. Entre ellas podemos encontrar los procedimientos de las empresas en los que se basa su funcionamiento. Entre las normas no escritas se pueden destacar creencias, formas de actuar o de comportarse o tradiciones que caracterizan a una determinada organización.
Las personas colaboradoras que vienen de otras empresas son capaces de resaltar cuales son las características positivas y negativas de la cultura empresarial, ya que, al venir de una estructura distinta, son capaces que hacer notar estas diferencias.
Existe una serie de características y condiciones que las personas buscan dentro de la cultura de la empresa, sobre todo después de la pandemia, donde el valor por la familia y la vida personal comenzó a tener una valoración mayor.
A continuación, se exponen algunos conceptos que son relevantes para entender la realidad de las empresas hoy en día y cuales son las principales demandas de las personas:
- Flexibilidad: Como lo hemos ido comentando, la vida familiar y personal a comenzado a tener mayor valoración entre los trabajadores, por lo que se busca tener mayor flexibilidad para integrar el trabajo en la vida personal en lugar de adaptar su vida personal al trabajo.
La flexibilidad laboral impulsa a las empresas a dejar de lado la presencialidad y centrarse en el rendimiento, es decir, más allá de buscar que los trabajadores y trabajadoras cumplan con un horario fijo, es hacer hincapié en que puedan trabajar en el momento y en el lugar en que sientan que son más productivos, desde el principio y para siempre.
Pero es importante mencionar que está flexibilidad laboral también trae consigo nuevos retos y desafíos, ya que es necesario que todos las personas reciban un trato equitativo, con independencia del lugar y el horario en el que trabajen.
- Asincronía: Cada vez se les da más importancia a esquemas de relacionamiento de espacios asincrónicos, sobre todo cuando el equipo no comparte el mismo huso horario.
La virtualidad representa una ventaja en este sentido, ya que no es necesario estar conectados al mismo tiempo para interactuar e incluso para trabajar, aquí se reconoce que todas las personas tienen necesidades diferentes y se le da más importancia a la flexibilidad y la libertad.
Es fundamental que las empresas cuenten con políticas claras sobre la forma de comunicarse, basadas en herramientas que permitan que la asincronía no sea un obstáculo, sino, un habilitador de buena comunicación y cultura empresarial.
- Bienestar: Cuando los trabajadores y trabajadoras sienten que pueden lograr un bienestar mental, físico, emocional y económico, la empresa comienza a ir mejor, es decir, el bienestar de la empresa dependerá del bienestar de sus colaboradores.
Fomentar el bienestar significa ofrecer a los colaboradores un trato humano y empático, en donde exista más tiempo libre para disfrutar de la vida personal y familiar, esto puede ser desde dar media jornada los viernes a ofrecer programas de ayuda y permisos para el cuidado de familiares; replanteando los procesos que se llevan a cabo dentro de la empresa, como, por ejemplo, la duración de las reuniones y el aprovechamiento de otros canales como el email o el chat de WhatsApp.
The Great Reshuffle
La pandemia ha llevado a cambiar la organización de la empresa, la importancia ahora radica en priorizar el bienestar de los empleados y a prestar más atención al lugar y el horario en el que se trabaja. En LinkedIn denominan a esta nueva relación laboral como “The Great Reshuffle” o “La gran dimisión” en donde los valores que la forjan son la flexibilidad y la empatía.
Las organizaciones que no sean capaces de adaptarse a este cambio, es posible que comiencen a tener problemas con sus plantillas y dificultades en la retención de profesionales. En un estudio realizado por Microsoft en 2021, se pudo obtener que el 41% de los empleados de todo el mundo dice estar dispuesto a renunciar en los próximos 12 meses, la escasez de mano de obra ha afectado a varios sectores de la industria.
Es por esto, que las organizaciones deben replantearse su cultura empresarial y además renovar sus marcas como empleadores para aprovechar la oportunidad de contratar a los mejores profesionales. Cada vez los candidatos son más selectivos, se dan el tiempo de revisar el doble de anuncios antes de presentar su solicitud de empleo. Por tanto, las empresas han ido mejorando sus mensajes poniendo énfasis en la flexibilidad laboral, los beneficios inclusivos y tasas de movilidad interna.
Finalmente, para tener éxito en la era de “The Great Reshuffle”, no solo se debe atraer y retener a los profesionales, sino que además hay que formular estrategias para conservar y mejorar la cultura empresarial.
Fuentes:
- Castor.com
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